En 1863, una pequeña pastelería que hoy en día es La Flor de Castilla creó en su obrador del centro de Ávila un dulce que asombraba a propios y extraños. Por su sencillez y su sabor único. Se bautizaron con el nombre de la patrona de la ciudad: Santa Teresa. No tardaron en convertirse en todo un referente de la gastronomía abulense.

Hoy, más de 150 años después, las Yemas de Santa Teresa son una de las señas de identidad más reconocibles de la ciudad amurallada, manteniendo su receta centenaria a lo largo del tiempo. Solo yema de huevo y azúcar. Sin trampa ni cartón.

Las auténticas Yemas de Santa Teresa están elaboradas con ingredientes 100 % naturales. Sin aditivos, sin conservantes. Y muy importante: sin gluten, por lo que pueden ser disfrutadas también por celíacos y personas intolerantes. Se preparan cada día en nuestro nuevo obrador, para que disfrutes de su frescura y de su calidad garantizada.

Datos de interés: Sin aditivos, Sin conservantes, Sin gluten, Tierra de sabor Conservación: Conservar en lugar seco y fresco. Una vez abierto, conservar en refrigeración entre 0 y 5 ºC y consumir antes de 15 días. Peso Neto: 140 g

Ingredientes: Azúcar Yema de huevo (80%) Alérgenos: Derivados del huevo Valores nutricionales por 100 g: Valor energético 1659 kJ/394 kcal Grasas 12 g Saturadas 5,2 g Hidratos de carbono 63 g Azúcares 52 g Fibra alimentaria 3,5 g Proteínas 6,6 g Sal 0,07 g