Las semillas de rudrashka se usan en el budismo para orar. Cuenta la leyenda que el dios Shiva, mientras bailaba su danza tándava de contemplación y regocijo, viendo los sufrimientos y penurias de los seres humanos comenzó a llorar. Sus lágrimas, al entrar en contacto con la tierra, se transformaron en las semillas de rudraksha.

Mala significa "guirnalda" y japa significa "repetir oraciones" en sanscrito, la lengua tradicional india. Todos los malas se componen de 108 cuentas, la más grande que cuelga en el penacho de hilos, representa el sagrado monte de Meru.

Siéntate en la postura de meditación o un lugar tranquilo y escoge un mantra. Para orar con un mala, debes sostenerlo con la mano derecha, mientras que las cuentas pasan entre los dedos pulgar y corazón. Sostén tu mala en la mano derecha y empezando en la cima del cordón, repite el mantra, una vez cada cuenta. No debes pasar por encima de la cuenta más gruesa, así que cuando termines una ronda, si quieres continuar con otra, gira el mala y comienza de nuevo avanzando en la dirección opuesta.

El penacho de este mala contiene un talismán que esta compuesto por la letra en mandarín tradicional que significa prosperidad. Por ello, los tibetanos de parte del Tibet asiático, adornan con este símbolo los malas. Se cree que el talismán proporciona todo lo que desees infinitamente.